No. No viajo por el mundo.
No voy a ninguna parte.
No saco fotos de tribus ni paisajes inhóspitos.
No tengo una vida interesante.
No estoy triste. No quiero ser genial.
No veo más que a mis cuatro puntos cardinales...
que se dividen en cuatro más y así y así.
Resulta que mi vida cotidiana es lo que veo.
No está mal.
No.
No está mal.
¿Será hereditaria la esquizofrenia?
No hay comentarios:
Publicar un comentario